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El libro de proverbios está lleno de sabiduría antigua y moderna, a pesar de que fue escrito hace más de 1000 años. Sin embargo, hoy en día sigue brindando la misma sabiduría o un poco más para los problemas del presente. Todo aquel que adquiera los conocimientos del libro de Salomón será sabio, como expresa sus mismas palabras.
No hay un libro en la tierra que pueda compararse con la sabiduría impregnada en el libro de proverbios, escrito en gran parte por el rey Salomón en Jerusalén, hijo de David, rey de Israel. Es tan útil sus enseñanzas que puede guiar tanto a un vagabundo como a un millonario a tener una vida plena.
Sus prosas están en forma de regla, pero son aplicables para todas las áreas de tu vida. Es muy asertivo a la hora de enseñar a actuar bajo la moral y la ética. También te guía en la búsqueda de riqueza tanto material como espiritual.
Las riquezas mal habidas no sirven de nada, pero la justicia libra de la muerte.
Proverbios 10:2
Es indescriptible la sabiduría que transmite el libro, es todo una cátedra pura. No importa si no eres creyente, este libro aporta conocimiento a tu vida que te van a acompañar hasta tu muerte. Salomón pudo encontrar la forma para que tanto un niño inofensivo como un anciano entendiera el libro.
El libro de proverbios es magia pura, sus palabras parecen venir del mismo cielo.
El alma del perezoso desea, pero nada consigue, más el alma de los diligentes queda satisfecha.
Proverbios 13:4
Es sorpréndete como uno de los hombres más millonario de la historia, John Rockefeller se educó leyendo la Biblia al principio y al final de cada día, además a su edad temprana se propuso ser rico. Como dijo sobre él su socio de negocios Maurice Clerk: “John tenía fe absoluta en dos cosas: el credo baptista y el petróleo”.
Según cuenta la historia, fue educado escuchando los libros de proverbios.
“No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”
(San Mateo, 4, 3-4).
Vivir en paz, tranquillo y con sabiduría son parte de los beneficios que te brinda el libro de proverbio. Te guía hacia la verdad y como dijo jesús, la verdad te hará libre.
Además, el libro te ayudará a tomar mejores decisiones en la vida que te evitaran andar por sendas tenebrosas y te abrirá los caminos hacia la verdad. Sin duda, el libro que todo ser humano debería leer para vivir una vida plena y feliz en la tierra.
El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.
Proverbios.1.7.
Por cuanto llamé, y no quisisteis oír, Extendí mi mano, y no hubo quien atendiese
Proverbios.1.24.
Porque Jehová da la sabiduría, Y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia.
Proverbios.2.6.
Hijo mío, no te olvides de mi ley, Y tu corazón guardé mis mandamientos
Proverbios.3.1.
Porque largura de días y años de vida Y paz te aumentarán.
Proverbios.3.2.
Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad; Atalas a tu cuello, Escríbelas en la tabla de tu corazón
Proverbios.3.3.
Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia.
Proverbios.3.5.
Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.
Proverbios.3.6.
No seas sabio en tu propia opinión; Teme a Jehová, y apártate del mal
Proverbios.3.7.
Aquí te compartimos un pequeño texto escrito por Santa, una increíble chica que forma parte de los lectores de Librería Quisqueya:
El libro de los proverbios es nuestra mejor guía para saber cómo dar pasos firmes, además nos ayuda a manejarnos frente a circunstancias difíciles que se nos presente en nuestro diario vivir.
De esa manera, aprenderemos a manejarnos con nuestro prójimo, porque adquiriremos la sabiduría que viene de Dios “llena de paz y justicia”, la sabiduría que acompañó al rey Salomón e hizo que reinara con justicia, grandeza y rectitud; además, aprenderemos a discernir si algo viene de Dios oh no.
Según el criterio humano, cada acción u obras es justa y propia, pero la Biblia nos manda encomendar nuestro camino a Jehová y nuestros pensamientos serán afirmados, es entonces cuando notamos la diferencia de nuestro proceder.
Pero no es más que el temor a Jehová que nos ayudará a apartarnos del pecado y es cuándo nuestros pasos se corrigen.